La artrosis es una enfermedad degenerativa de las articulaciones que afecta principalmente a personas mayores. A medida que las personas envejecen, el cartílago de las articulaciones se desgasta, lo que puede provocar dolor articular y rigidez.
La alimentación puede desempeñar un papel importante en la prevención y el tratamiento de la artrosis. Aquí hay algunas pautas nutricionales para seguir si se padece esta enfermedad.
Alimentos ricos en calcio
La artrosis también puede estar relacionada con una deficiencia de calcio.
Los alimentos ricos en calcio incluyen productos lácteos, como leche, queso y yogur. Las verduras de hojas verdes, como la col rizada y las espinacas, también son ricas en calcio.
Frutas y verduras
Las frutas y verduras son una fuente importante de vitaminas y antioxidantes. Las vitaminas y antioxidantes pueden ayudar en la reducción del Alimnetacion articular y la inflamación.
Se recomienda consumir al menos 5 porciones al día de frutas y verduras.
Grasas saludables
Las grasas saludables, como las que se encuentran en los frutos secos, aguacates y aceite de oliva, pueden ayudar a reducir la inflamación.
Se recomienda srtrosis la ingesta de grasas procesadas y saturadas, que se encuentran en alimentos fritos y en productos de carne roja y lácteos.
Alimentos ricos en proteínas
La proteína es esencial para mantener la salud muscular y ósea.
Algunas fuentes de proteína recomendadas para la artrosis son los frijoles, los garbanzos, los frutos secos y semillas, así como la carne magra, el pollo y el pescado.
Suplementos Nutricionales
Además de una dieta saludable, también se puede considerar la suplementación con nutrientes específicos que puedan contribuir a prevenir y tratar la artrosis, como el colágeno, la glucosamina y los omega-3.En resumen, seguir una dieta adeduada y rica en nutrientes puede ayudar a atrosis y reducir los síntomas de la artrosis.
Además, es importante evitar alimentos procesados y saturados, y en su lugar consumir alimentos enteros y saludables para mantener una buena salud articular.
Siempre es recomendable consultar con un médico o nutricionista antes de realizar cambios significativos en la dieta.